Cada vez son más las organizaciones comprometidas con la salud de sus trabajadores que sitúan la gestión del absentismo entre sus prioridades.
Una mala gestión del absentismo no sólo tiene costes para la Seguridad Social.
La relación entre la situación económica de la empresa y el bienestar y la salud de su trabajadores se hace evidente cuando calculamos los costes de una baja laboral.

La empresa debe asumir una parte del coste de la prestación que percibe el trabajador durante su baja. Además de los costes directos, la empresa soporta los costes indirectos derivados de la sustitución del trabajador de baja (o la falta de ella):
Bienes y servicios que se dejan de realizar
Formación del sustituto
Gestión del proceso de selección
Tiempo de adaptación al puesto del nuevo trabajador…

La consultora americana MERCER cuantifica los costes indirectos derivados de una baja por enfermedad común en dos veces y medio los costes directos.

Con independencia del tamaño de la organización, es conveniente conocer y calcular los costes del absentismo para evitar que se convierta en un problema. Para ello puedes utilizar nuestra calculadora de costes de absentismo.